El año pasado, presenté un proyecto de comunicación por
el cual le solicito al Ejecutivo la posibilidad de realizar programas intensivos de prevención de VIH y
campañas de detección de la enfermedad en forma optativa y anónima en todas
las escuelas secundarias de la Provincia de Santa Fe, a partir de los 14 años
de edad.
Según investigaciones recientes, aproximadamente el 30%
de los que tienen VIH no lo saben; y según una encuesta realizada por la Asociación
Civil Vox, donde se le consultó a personas entre 15 y 30 años, el 53% de los
encuestados manifestó no usar preservativos a la hora de mantener relaciones
sexuales; por eso es fundamental la
realización de una fuerte campaña de
concientización y prevención de la enfermedad en todas las escuelas
secundarias de nuestra provincia de Santa Fe.
Recordemos que en el 2012 se cumplieron tres décadas del
primer diagnóstico de sida en la Argentina. Durante este período, tanto la
epidemia como las respuestas preventivo-asistenciales atravesaron diversas
etapas. En el transcurso de estos años fueron variando las problemáticas, los
modos de pensarlas y nuestras capacidades de implementar respuestas.
Actualmente, la epidemia en el país se ha estabilizado y
no presenta cambios significativos desde hace al menos cinco años. Se
diagnostican anualmente alrededor de 5.500 personas con VIH; solo fallecen
aproximadamente 1.400 personas por sida y se infectan alrededor de 100 niños/as
por transmisión vertical. Así, las tasas de diagnóstico de VIH (12 por 100
mil), de mortalidad por sida (3,3 por 100 mil) y de transmisión perinatal (5%)
permanecen estables en un piso que debemos modificar.
El
Papel del Estado es Fundamental
Como representantes de la voluntad popular debemos, una
vez más, agudizar la mirada, repensar los problemas y llevar adelante nuevas
soluciones, especialmente, en el nivel local, a fin de identificar en cada región los nudos críticos que dificultan seguir
disminuyendo la incidencia y la mortalidad así como aumentar el diagnóstico temprano y mejorar la calidad de vida de las
personas y familias afectadas. Por eso consideramos fundamental la prevención
y la detección en las edades más tempranas posibles, para seguir la lucha sin
cuartel contra esta enfermedad. Mejorando en la accesibilidad a información y
recursos preventivos; mejorando en la
accesibilidad al diagnóstico del VIH y otras ITS; aumentando la calidad de
atención de las personas con VIH; y haciendo permanentes campañas en la reducción del estigma y la discriminación.
A pesar de que hoy disponemos de un conocimiento
acumulado de muchos años sobre las estrategias exitosas en prevención y se han
mejorado enormemente las técnicas diagnósticas y los tratamientos para las
personas infectadas, sigue habiendo inequidades importantes en el acceso a
estos recursos, en la prevención y en la educación.
Es por ello, que esta enfermedad merece especial atención
y más aun en los casos que arrojen un resultado positivo de la enfermedad, en los cuales se deberá otorgar la contención
necesaria y brindar el tratamiento en forma gratuita e integral.
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